Salomé Ramos Niño tiene 15 años, es activista ambiental y es la creadora de la fundación Tu Planeta Tu casa, en Villavicencio, la cual busca principalmente educar y empoderar a niños y jóvenes en el cuidado y el activismo ambiental a través de diversos proyectos y actividades.
Su interés por este tema nació a partir de una problemática que observaba con frecuencia en su ciudad: la basura en las calles.
A sus nueve años, con el apoyo de su madre, abrió un canal de YouTube para transmitirles a niños y jóvenes la importancia del cuidado y la preservación del medio ambiente. Siguiendo ese propósito, Salomé creó su fundación, la cual nace a partir de dos objetivos, el primero, crear algo comunitario y el segundo, empoderar a los niños en el tema ambiental, para eliminar el estigma de que un niño no puede alzar su voz sobre temas importantes.
En su fundación ha desarrollado varios proyectos, uno de ellos es ‘Niños educan a niños’ en el que busca crear conciencia, ya que como ella misma lo expresa, “cuando educas a un niño con conciencia estás educando a un adulto responsable para el futuro”. Así mismo, mediante la campaña ‘Más Oxígeno, Más Vida’ ha logrado plantar muchos árboles alrededor de la ciudad.
Además, ha participado como panelista en diversos foros alrededor del país y ha recibido varios reconocimientos a nivel local y nacional. En 2021 fue escogida por la fundación She Is como la ‘Niña She Is del Año’, en el Global Forum, que desarrolla dicha fundación, por su trayectoria y liderazgo en temas ambientales.
En entrevista con La Pluma, la líder de la fundación Tu Planeta Tu casa, cuenta cuales son los mayores retos que vive por ser activista ambiental siendo mujer y adolescente.
¿Qué tan difícil es ser activista ambiental en Colombia?
Del 1 al 10, yo digo que un 10 (…) Es muy difícil porque muchas veces te van a cerrar las puertas. La gente dice: “a ti no te van a dar oportunidades por ser activista”, porque hay un estigma de que los activistas somos peleones, que nos gusta romper cosas. Y yo entiendo la palabra activista, como actuar ya, es decir, hablar con las acciones (…)
Muchas veces nos cierran las puertas y mucho más por ser mujer, es algo triste y es la realidad, y no es algo solo del país sino de todo el mundo. Como mujeres hemos podido ir avanzando en nuestra historia, pero a la vez hemos visto muchas lideresas sociales y ambientales asesinadas por alzar su voz, y yo creo que es el gran miedo que tenemos las y los activistas, tampoco es dejar a los hombres a un lado, porque también han sufrido por esas luchas. Nuestro miedo es alzar la voz y que nos callen para siempre. El gran miedo es el de luchar por los derechos de los demás y que tus derechos sean reprimidos. Yo creo que eso es lo duro de ser activista y más siendo niño…
¿Ha recibido amenazas por ser activista ambiental?
Sí, no me acuerdo la fecha (…) Yo era una niña de 13 años (…) Yo estaba en un tema del parque Alma Viva, que nuestro alcalde estaba mostrándole a la gente. Yo había salido a tomar tinto y un señor se me acerca, me empieza a decir que, si yo seguía en el tema de hacer actividades con Cormacarena, la Alcaldía y la Gobernación, él me iba a hundir en redes sociales. Como yo era una niña de 13 años no dimensioné sus palabras. Mi mamá puso la denuncia en la Fiscalía, quedó la denuncia, más no se hizo nada, no se tomaron cartas en el asunto.
¿Por ser mujer y además joven ha sentido que sus opiniones no son tomadas en cuenta?
Sí lo he sentido y en varios eventos me han silenciado por muchas cosas. Primero, por ser niña; segundo, por ser mujer, y tercero, porque como soy niña dicen que no tengo experiencia. Entonces, son esos tres factores por los que me han callado (…) Me pasó cuando hicimos el Plan Nacional de Desarrollo municipal. Hicieron unas mesas de trabajo en la ciudad. Yo estaba en la mesa de los temas ambientales, y pues yo había salido como una de las voceras; llegó un señor, estábamos tres voceros, dos hombres y una mujer, y me dijo: tú no puedes estar, y pusieron a una mujer adulta.
¿Qué piensa respecto al estigma de que el ambientalismo es solo moda?
Yo inicié con el activismo antes de que se colocara de moda (…) Antes de eso era difícil actuar porque la gente no tenía consciencia, pero ahora como vemos que en todas las redes sociales está de moda ser sostenible y ser amigable con el medio ambiente, es un poco contradictorio, porque a veces decimos eso en redes sociales, pero no actuamos. Estar de moda es solo eso, va a ser solo un momento y deja de pasar de moda. El activismo ambiental no puede ser moda, porque el ambientalista es alguien de corazón, es alguien que es resiliente con su madre tierra (…) Hoy las grandes empresas lo utilizan para hacer marketing verde, pero es falso, muchas veces nos dicen que ese producto es súper ecológico y no es así.
¿En Villavicencio hay una política ambiental efectiva?
Con decirte que hay una resolución a nivel nacional que se hizo en el 2019 y empezó a regir el año pasado y ni siquiera se ha regido bien. Con solo eso puedo decir que estamos mal en políticas, en resoluciones y en normativas ambientales. Está la normatividad de 2184 del 2019 que empezó a regir hasta el 2021, que trata de la separación de residuos sólidos, de los diferentes colores de la basura, y eso en la práctica no se está aplicando (…) Las resoluciones y normativas que hay en la ciudad, es muy difícil que estén reguladas (…) En Villavicencio, en el Plan de Ordenamiento Territorial, no están contemplados casi 700 humedales (…) Hoy creo que las normativas y las políticas que hay, se hacen y se cumplen a medias muchas veces. Lo que nos hace falta, yo creo, es luchar porque las políticas se cumplan y que haya una veeduría de estas normativas, hasta que realmente se cumplan al ciento por ciento.
¿Cuál considera que es el mayor reto al que los seres humanos nos enfrentamos en términos ambientales?
El tener conciencia, cultura (…) En temas de educación ambiental estamos mal, los colegios no la están aplicando. Pero tampoco es colocar una cátedra ambiental de dos o tres horas a unos niños porque se van a cansar (…) Estamos mal en la educación ambiental porque en realidad no le enseñamos a un niño el porqué de la importancia del cuidado del medio ambiente. A las universidades les falta la educación ambiental y lo digo por experiencia propia. Una vez fui a una universidad que tenía la carrera de Ingeniería Ambiental y la resolución 2184 (Código de colores para la clasificación de los residuos sólidos) ni siquiera regía dentro de la universidad, desde ahí estamos mal. Uno de los problemas más importantes del tema ambiental es la educación, sin esta no existe la concientización.
¿Cómo se debe educar a un niño para que tenga conciencia ambiental?
Yo lo he hecho con temas lúdicos. Un niño es una esponjita en la etapa de entre los cuatro y los siete u ocho años, y ellos son una esponjita que van tomando toda la información en su cabecita. Si hoy llegas y sientas dos horas a un niño a hablarle de un tema ambiental se te va a aburrir o se va a poner a hacer otras cosas. Entonces, a los niños debes enseñarles con juegos, temas lúdicos, sacarlos. Algo que en la fundación nos ha servido es llevarlos al campo, tú llevas a un niño y él es feliz. Me pasaba mucho cuando realizábamos tareas de liberación de animales, todos querían ir, eran muy felices.
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