Escrito por: Luisa Buitrago
La cárcel de Villavicencio se convirtió en un pico desenfrenado de contagio del COVID-19 en Colombia. Hasta hoy se estiman más de 500 personas infectadas por el virus entre internos y funcionarios.
En la celda 6 se encuentra Oscar Díaz, quien está recluido hace 27 meses en la cárcel de Villavicencio por el delito de hurto y resultó contagiado por el coronavirus.
“La situación es malísima, los que están contagiados deberían tener mejor trato, pero son los que están más abandonados”
“La situación es malísima, los que están contagiados deberían tener mejor trato, pero son los que están más abandonados”, aseguró Salomón Díaz, padre de Oscar.
Oscar no presentó sintomatología y supo que tenía COVID-19 por una prueba que le practicaron hace 15 días.
Inmediatamente lo aislaron junto a otros reclusos contagiados a unas celdas que son una sucesión de colchonetas en el suelo. Allí deben esperar a recibir el tratamiento.
“Mi hijo está en unos calabozos con otros infectados y duermen en el piso, prácticamente los tiran a morirse”, añadió Díaz.
Las medidas que se implementaron en la cárcel según Tania Cortés, secretaria de Salud municipal, van desde la parte de vigilancia, salud pública, prestación de servicios y salud ambiental.
Además, añadió que se han hecho reuniones con las autoridades del penal y se han enviado comunicados directos para dar indicaciones sobre el aislamiento, el control médico y el manejo del personal que ingresa al centro penintenciario.
“Mi hijo está en unos calabozos con otros infectados y duermen en el piso, prácticamente los tiran a morirse”
La cárcel de Villavicencio permanecerá en cuarentena hasta que la cifra del contagiados en el lugar sea mitigada. Con visitas directas de la Secretaría de Salud a la entidad, se buscarán soluciones para esta crisis.
La grave situación se evidencia en un vídeo grabado en la cárcel de Villavicencio, en donde se muestra a un interno moribundo mientras espera sentado, a recibir atención médica.
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