Por: Luisa Suárez
A sus 27 años y con un tecnólogo en Gestión de Talento Humano del SENA y seis semestres de Administración de Empresas en la Corporación Universitaria Minuto de Dios, Brandon Rodríguez, osado y valiente decidió empacar sus sueños en la maleta y emprender una nueva vida en el viejo continente
A raíz de la falta de oportunidades, Brandon, emprendió rumbo a Polonia, un país que está a más de 9 mil kilómetros de distancia de Colombia. Allí ha atravesado por grandes triunfos laborales, pero también por diversos ataques racistas y xenófobos.
Este joven bogotano pertenece al 2,27% según la ONU, de la población colombiana migrante.
Luisa Suárez: ¿Cuáles fueron las principales razones por las que emprendió su ida a Polonia?
Brandon Rodríguez: En primera instancia, pienso que a todos nos llega una oportunidad, así que no fui la excepción, tuve la fortuna de emprender; uno, de ir a Estados Unidos o dos, Europa. Sabía que para hacerlo tenía que trabajar mucho y esperar poco, después de enviar correos electrónicos a diferentes empresas una de ellas me contactó.
L.S: ¿Cuál fue la empresa que lo contactó y que función cumplía allí?
B.R: La empresa de nombre West Automotive, ubicada en Opatówek cerca de la ciudad de Kalisz, se especializaba en el área de soldadura para contenedores que transportaban partes de autos, yo era parte del área de ensambles. Podría decir muchas cosas de mi recorrido, pero básicamente así comenzó.
L.S: ¿Cómo cataloga su estancia al inicio en el país?
B.R: Al principio no fue nada fácil, cuando llegué a este país viví con personas de muchos lugares del mundo, eventualmente no los conocía y su cultura era muy distinta a la mía, así que el choque cultural fue duro, de igual manera fui víctima de xenofobia y racismo.
Según el informe Mundial sobre Migraciones 2020, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más del 80% de los jóvenes están en contra de acoger inmigrantes en Polonia, e incluso hasta hace unos meses aún se conocían denuncias por xenofobia y racismo en el país.
L.S: ¿Ha tenido experiencias donde se sintió discriminado por ser migrante?
B.R: Si las he tenido, tuve una exnovia polaca, cuando terminamos, me amenazó de muerte, me dijo que en cualquier parte del país se podían deshacer de mí, pero, a decir verdad, he tenido bastantes experiencias en mi vida y en mi país, como para dejarme amedrentar por eso.
L.S: ¿Las situaciones de xenofobia y racismo son más marcadas para el colombiano?
B.R: No solo para el colombiano, también para cualquier extranjero, asimismo se nota el rechazo hacia los alemanes. Mis amigos, por ejemplo, una vez estaban tomando en un bar, la policía llegó, los llevó a la estación y los golpearon por ser colombianos. En los aeropuertos también se ve la discriminación al colombiano, el pasaporte colombiano es muy delicado.
El Primer ministro Mateusz Morawiecki hace un par de años, asistió a una marcha ultranacionalista donde se exhibieron mensajes que decían “Polonia gente blanca” y en donde asistieron también miles de neonazis con uniformes que aludían a los alemanes de 1939.
LS: ¿Cuál ha sido una de sus peores experiencias viviendo allí?
B.R: La peor situación fue llegar a un pésimo trabajo, para mi mala suerte, llegue a una empresa que me llevó a vivir a un sótano, con un amigo colombiano.
Viví con ucranianos y realmente esas personas bebían mucho, no tienen muy claro el concepto de higiene, el problema entre ellos, mi amigo y yo creció, así que al final nos despidieron. Afortunadamente tengo una amiga filipina que me ayudó a entrar en el trabajo que tengo actualmente.
L.S: ¿Recuerda en especial algún momento positivo de su estancia?
B.R: La mejor situación fue haber visitado el campo de concentración en Auschwitz, por el componente histórico que tiene, darme cuenta de cómo pensaban los alemanes, eran realmente muy ordenados, me di cuenta de cómo el hombre al buscar la perfección, terminó haciendo cosas impensables.
L.S: ¿Qué le diría a la persona que está interesada en conocer este país y en el futuro establecerse allí?
B.R: Yo recomendaría en primera instancia estudiar, tener contactos, yo vine sin conocer a nadie y la tuve realmente difícil; también aprender inglés es fundamental.
Recomendaría que visite Polonia, es una buena entrada para Europa, si en este momento quiero irme para Holanda, Italia o para Alemania, puedo hacerlo, tengo los documentos en regla y realmente lo podría hacer.
Un amigo me dijo una vez, para viajar no se necesita plata, solo ganas de seguir adelante.
Con una economía en auge, que de acuerdo con el primer ministro Mateusz Morawiecki se debe a la política fiscal solidaria, donde se beneficia el ciudadano y las distintas corporaciones en Polonia.
Existen diversas situaciones que obligan a las personas a migrar de su país, Brandon Alexis, señaló su experiencia, sus desventuras y los obstáculos que ha logrado rebasar, y los cataloga como aprendizaje, además recalca el valor que ha tenido este país en su desarrollo económico y social.
Polonia, un país que cada vez acepta más migración, asimismo, se convierte ininterrumpidamente en un foco de auge económico cada vez más fructífero, alrededor de unos 655.985 migrantes llegan por año según informes de la ONU.
Comments